¿Sabrías decirme quién eres y quién quieres ser? ¿Sabrías decirme qué necesitas ser?
Si eres capaz de contestar esta pregunta, seguramente tengas muy claro cuál es tu camino, hayas identificado que necesitas cambiar y exista un objetivo que quieres alcanzar. Si no te lo has preguntado nunca, es muy probable que vivas improvisando y te adaptes a las situaciones tal y como vienen, quizás sepas dónde llegar pero igual te falta un plan.
Al final, en la vida existen varios tipos de personas, las que marcan el camino y a las que se lo marcan los demás.
Es curioso pero uno de los primeros pasos para ser dueños de nuestras vidas es precisamente darte cuenta de que no lo eres. Y que necesitas entender tu realidad y tu papel en el mundo para dibujar el mapa en el que ubicarte. No sabemos quiénes somos hasta que nos lo preguntamos.
En este punto me recuerda a las realidades de las Marcas. Algunas tienen muy claro que quieren ser de mayores, y quizás algunas se preguntaron qué tendrían que ser para llegar allí, pero muy pocas llegaron a preguntarse si lo que son hoy es compatible con lo que quieren ser mañana.
Parte del éxito de un proyecto de Marca, no es el simple posicionamiento de la misma, ni siquiera su propuesta de valor diferencial, o su anecdótica identidad. Parte del éxito de una Marca reside en entender lo que somos y lo que deberíamos ser, y comprender si ese GAP de transformación es realista internamente.
¿Puede alguien que es serio y aburrido, transformarse en el más divertido de una fiesta? ¿Podría ser simplemente correcto y cordial? ¿Podría llegar simplemente a sonreir más?
Entre lo que somos y lo que deberíamos ser, pueden existir muchos grados de evolución. Entender dónde está nuestro límite operativo, es entender dónde está nuestra realidad real.
Cuando forzamos a un equipo, a una cultura, a una Marca a ser algo que no puede alcanzar, se produce la frustración interna, la desconexión entre Marca y Cultura, y los problemas de personalidad interna. Desenfoque.
Por ello siempre que iniciamos un proyecto de Marca es conveniente empezar con un análisis del SOY, QUIERO y NECESITAS.
El SOY es la realidad que tenemos como Marca, y si hablamos de personalidad de Marca los atributos reales que hoy se pueden ver, percibir y sentir en tu cultura.
El QUIERO es el punto en el que nos encantaría estar, un horizonte de deseo donde nos imaginamos en el mañana. Un ideal interno.
El NECESITAS es aquello que nuestra audiencias esperan de nosotros, lo que nos hará únicos en el mercado, lo que realmente importa.
Como podéis observar pueden existir diferencias entre los 3 vectores. Las compañías que más alineados tengan los 3, tendrán Marcas más enfocadas y competitivas.
Para entender estos factores:
1. EL SOY
Primero queremos saber ‘Cómo somos’, y para ello necesitamos preguntar y extraer qué atributos son los que creemos que nos definen HOY
Se hace un pequeño Test en el que damos a escoger entre 40-50 palabras, las 4-5 que mejor nos definen hoy como Marca, desde un punto de vista interno.
La suma de las respuestas de todos nuestros empleados, nos dará una realidad cercana de la configuración interior de nuestra Marca.
2. EL QUIERO
Una segunda parte de este Test tiene la intención de proyectarnos en un futuro cercano, nuestra ambición y entender la percepción interna de lo que no está funcionando hoy porque lo proyectamos de forma diferente mañana.
Para ello empleamos preguntas proyectivas como ‘Si la Marca mañana fuera un coche, sería…’ (un animal, un objeto, etc..). De aquí extraemos una serie de atributos deseados que podemos tener hoy o no.
3. EL NECESITAS
¿Qué valoran tus audiencias de tu categoría? ¿Qué tienen los demás que yo no tengo? ¿Qué hacen todos que yo hago de la misma manera? ¿Qué no hace nadie que yo pueda hacer?
Tendremos una lista de atributos que nos permiten construir un espacio diferencial y competitivo en nuestra categoría.
Ahora es el momento de entender si lo que SOY está muy lejos de lo que NECESITO, eso nos puede provocar problemas de reestructuración de procesos, cambios culturales y enfoque incluso de negocio.
Si lo que QUIERO está muy lejos de lo que NECESITO, tenemos un problema de foco de dirección y eso es realmente complicado porque afecta a las decisiones fundamentales de la Marca y la compañía.
Si lo que QUIERO y lo que NECESITO cuadran pero está lejos de lo que SOY, existe una voluntad, un camino y sólo es cuestión de una transformación cultural, pero como mínimo entendemos las implicaciones que nos va a ocasionar.
Por lo tanto podemos calcular la triangulación de nuestra Marca con la realidad, podemos llegar a entender cómo de alineados estamos con lo que necesitamos.
El Cálculo:
Diferencia: La distancia entre lo que Soy y lo que Quiero.
Distorsión: La distancia entre lo que Quiero y lo que Necesito.
Desconexión: La distancia entre lo que Soy y lo que Necesito.
Al final, si no soy lo que quiero ser, ni lo que necesitas que sea, simplemente no soy.
Como todo en la vida, el equilibrio y el conocerse a uno mismo es fundamental para avanzar, para ir enfocados a lo que realmente importa.
En fin, triangular nos llevó a la luna.
COMMENTS