Animal mitológico ideado por los antiguos poetas que figura un caballo con un cuerno recto en mitad de la frente: Unicornio.
Un término que hemos empleado para describir algo mágico, místico, casi imposible de creer y materializar.
El Unicornio es aquello que nadie tiene, pero todos son capaces de imaginar.
Este significado de algo ‘imposible’, fue el que empleó en 2003 Aileen Lee, para designar a aquellas empresas tecnológicas que fueran capaces de levantar un valor de mil millones de dólares en alguna de las etapas de su proceso de levantamiento de capital.
Hoy usado como descriptor de algunas de las compañías tecnológicas que superan ese valor, y que Forbes estima en 80 empresas. Muchos de los emprendedores y Startups, tanto tecnológicas como no, nacen buscando el Unicornio de sus vidas.
Pero lo cierto es que la vida no va de Unicornios.
La gran mayoría de las empresas que nacen no superan los 3 años de vida, y las que lo hacen cambian 2,7 veces su modelo de negocio por el camino.
Así que puedes seguir creyendo en los animales místicos o construir tu propio cuento.
Cualquier empresa que nace tiene 2 opciones fundamentales. Contar con algo que nadie tiene y nadie es capaz de copiar en el tiempo de desarrollo de su oferta. O tienes un caballo que no parece un caballo cualquiera.
Es decir, o tienes un Unicornio, o tienes una Marca poderosa.
Son muchas la compañías que nacen preocupadas en el QUÉ ofrecen, y muy pocas en el CÓMO lo hacen.
Hoy podemos ser diferenciales y crear valor, desde un producto/servicio completamente innovador, o desde una forma totalmente distinta de hacer las cosas.
Podemos vender las tazas, libretas, y merchan de toda la vida, con un tono distinto y una personalidad única, y tener un Mr.Wonderful. Un caballo que parece un unicornio.
O podemos tener las superbaterías conductoras, ser un Tesla, y ser literlamente un Unicornio muchos años.
Sinceramente, sólo el 0.7% de las compañías nace con una ventaja competitiva sostenible en el tiempo necesario para desarrollar la autonomía de la empresa, o conseguir la financiación necesaria.
Si eres del 99.3%, deja de buscar animales mitológicos y preocúpate por hacer lo que hacen los demás, pero de forma relevante y diferencial.
El prestar atención a tu Marca cuando naces te ayuda a construir lo que quieres ser.
Te ayuda a reducir tu inversión y tiempo en explicar quién eres, qué haces y por qué eres importante para mí. A atraer la inversión necesaria. A construir una posición única en un mercado. A ser atractivo para el talento. A conectar con quienes te rodean.
Te ayudará a transformar algo que todos pueden tener, en algo que pocos puedan ser.
Cuanto menos diferencial sea tu modelo de negocio, producto o servicio, más importancia tiene la Marca que lo conecta con tus audiencias. Ya que ayudará a construir un prisma distinto frente al resto del mundo.
Puedes intentar poner un Unicornio en tu vida (sólo el 30% de las innovaciones sobreviven los 3 primeros años), o puedes tener un Caballo Rosa.
Y recuerda, un Unicornio no es un caballo al que le pegas un cuerno… eso es un caballo con un cuerno pegado. Es decir, no intentes ser lo que no puedas sustentar… el pegamento no aguanta siempre y luego se ve el cartón.
En fin, yo quería un pony!!!
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