Vivimos en una de las eras con más ruido de nuestra historia. Más de 3.000 impactos diarios de comunicación, en un contexto multipantalla.
Que algo te impacte, te llame la atención, te importe, lo retengas y lo busques después, ha pasado de ser complicado a ser una tarea titánica.
Si a todo esto le sumamos que, sólo en España, se registran una media de unas 30.000 nuevas Marcas cada año, tenemos el escenario perfecto para pasar inadvertido por muy guay que creas que eres. O por muchos GRPs que pongas sobre la mesa.
Estamos en una etapa muy complicada para las Marcas, en las que no sólo se enfrentan a sus competidores directos, sino que compiten por un espacio en nuestra cabeza, por esos 8 segundos de atención que somos capaces de mostrar, por una oportunidad de que siquiera me mires.
Una vez Einstein dijo aquello de ‘Si quieres un resultado distinto, no hagas siempre lo mismo.’ Y esto es algo que debemos aplicar a la construcción y posicionamiento de Marca.
Podemos hablar de mil cosas, de cómo crear posicionamientos diferentes, de cómo desarrollar identidades que impactes (caso Desigual), pero vamos a centrarnos en uno de los primeros aspectos que vemos de una Marca: su nombre.
Llevamos años construyendo Marcas sobre las mismas premisas… cuando construyas un nombre que sea corto, sencillo, fácil de pronunciar… blablablabla. Esto ya lo pusimos en duda, en un artículo que titulamos ‘Hazlo Difícil’.
Nuestro cerebro funciona de varias formas, el modo esponja en el que absorbemos sin esfuerzo la información que nos rodea desechando el 80% de la misma. O el modo intensivo, en el que nos tenemos que esforzar por entender algo. Y cuando nuestro cerebro se esfuerza por entender, y comprender, esa información acaba en otro apartado de memoria mucho más duradero y accesible para nosotros.
Un nombre corto está bien, pero supercalifragilisticoespialidoso no se le ha olvidado jamás a nadie.
En fin, si queréis saber sobre cómo hackear la memoria de vuestro cerebro usando la construcción de Marcas, leer nuestro artículo: ‘Hazlo Difícil’
Siguiendo esta dirección, en cuanto a Naming, hemos visto y pasado por múltiples tendencias desde que las Marcas fueron Marcas.
Vivimos los nombres propios, los acrónimos, los descriptivos, los evocadores, llegamos a la era digital y acabamos en el abstraccismo, aquellos nombres impronunciables pensados para salvar el dominio ‘.com’, y ahí llegó el caos que todos conocemos.
Nombres que se construyen desde la fonética y no desde la gramática (WiZink), nombres a los que le faltan letras para pronunciarse (Flickr), nombres que repiten vocales o consonantes para facilitar el dominio (Deliveroo)… etc..
Ah sí! Ya acabamos en los años del -Fy. ¿Quieres un nombre? Ponle el sufijo ‘-fy’ y lo tienes… Spotify, Cabify, Nannify, Frontify, Beautify…
Llegado a este punto, la creación de un Nombre capaz de ser recordado, diferencial y que nos ayude a construir una idea clara, que sea fácilmente registrable y que pueda tener un dominio viable, es algo más que complicado.
Así que en una realidad en la que se registran 30.000 nuevos nombres cada año en España, en la que se registran más de 60 millones de dominios .com anualmente en el mundo, y en la que el ser humano dispone de una atención limitada… llega un nuevo tipo de nombre que resuelve parte de tus problemas.
NOMBRES FRASE
Los nombres frase son una de las alternativas perfectas para salvar muchos de los problemas que tenemos hoy para la construcción de Marcas.
En realidad no es un nombre, es una pequeña frase que actúa como un nombre descriptor o evocador de nuestra Marca. Una construcción que otorga flexibilidad, viabilidad registral y mayor facilidad para obtener tu dominio.
Cada vez los vemos más ahí fuera, y los iremos viendo mucho más a medida que todo se vaya complicando. Hasta, claro está, que se convierta en tendencia predominante y entonces tener un acrónimo de los años 60 será una buena idea… todo vuele, todo pasa.
De momento ya vemos ejercicios interesantes de Marcas relevantes adoptando este nuevo sistema de construcción.
Veamos algunos ejemplos que os sonarán:
Ladrón de Manzanas
B the Travel Brand
Different Roads
El Banco de Uno
El Armario de la Tele
Adopta a un tio
Look mum not hands
Oh my cut!
The Boring Company
Croqueta y presumida
Wellness that works
Future of Life
In Good Company
Toys R us
Alien Vault
The Sofa Company
Estos son solo algunos ejemplos de grandes y pequeñas Marcas que se han hecho un hueco en su mercado rompiendo los códigos de la categoría introduciendo un Nombre Frase.
Existen Marcas que lo usan de forma comprimida como ‘Life is Good – LG’, y que acabaron usándolo como tagline en una versión dual de Naming.
Podemos seguir construyendo Marcas cambiando letras por fonemas y complicar la existencia del ser humano, o hacer que recuerden ‘La compañía aburrida’ (The Boring Company). Tú decides.
En fin, y pensar que Branzai se llamaba ‘Al otro lado del Branding’… aixxxx
COMMENTS