Los equipos de fútbol, o de otros deportes, son especialistas en atraer clientes y fidelizarlos de por vida. Por ello toda empresa que quiera atraer y retener clientes, es decir, toda empresa, puede aprender mucho de ellos.
4 aprendizajes de los equipos de fútbol para construir marcas:
1
Una historia poderosa
Los equipos de fútbol no solo ganan; ganan a alguien, representando algo. Ganan por un sueño que comparten de forma contagiosa y al compartirlo, el aficionado se identifica con él, con la forma de conseguirlo, en contra de quién conseguirlo. Se identifica con una historia llena de retos a superar, se proyecta a sí mismo en esa marca, en ese sueño. Entendiendo este aprendizaje desde un punto de vista de identidad verbal, este tipo de marcas no habla desde el nosotros (empresa) hacia el tú (cliente), sino desde el nosotros (empresa + cliente) contra ellos (competencia).
2
Conexión emocional
Un equipo de fútbol conecta con sus audiencias a través de lo emocional, más allá de lo funcional. Y no a través de cualquier tipo de emoción, deben ser primarias, vibrantes, sinérgicas y sostenidas. Piénsese en un partido de fútbol, en las emociones que podemos vivir como espectadores. No son complejas, sino básicas: alegría al empezar, miedo en un momento dado, la sorpresa de una jugada que pone el contador a nuestro favor, el enfado contra quien lesiona a uno de nuestros jugadores, la tristeza del partido perdido… Además son intensas y compartidas, no solo por un estadio, sino por todas las personas que aunque no están con nosotros, están viviendo lo mismo que nosotros, en ese mismo momento. Y se sostienen, a lo largo de 90 minutos, y a lo largo de toda una vida.
3
Sin imperativos
Los equipos de fútbol están ahí, nosotros vamos a ellos. No nos invaden, no nos imponen elegirlos. Construyen bien sus marcas, las proyectan al mundo, y el mundo las elige. No nos dicen que compremos y mucho menos cómo comprar. Los elegimos y les acompañamos como queremos: abonándonos y comprándonos todo el merchandising, o viéndolos en un bar. Es decir, no nos obligan a que nuestro dinero sea parte indispensable de toda la experiencia que tenemos con ellos. Eso da al cliente sensación de libertad, de relación personal y no transaccional. Eso hace que llegue el día en que digamos “un día es un día, tengo que estar ahí” y paguemos hasta 2.000 euros por asistir a una final de Champions.
4
Un símbolo
El blanco, el Bernabéu, la Cibeles… Son Brand Assets por los cuales podemos reconocer al Real Madrid y recordar sus significados de heroicidad, lucha y liderazgo, identificándonos con ellos en una conexión emocional casi automática. Los equipos de fútbol son marcas con propuestas de valor claras y potentes que se trasmiten a través de todos los puntos de contacto con el cliente de forma coherente y consistente. Recordando y reforzando el sentimiento madridista, o culé, o indio, o perico.
Como vemos, los equipos de fútbol o de otros deportes, tienen un 10 en la construcción y gestión de sus marcas, en la conexión emocional con sus clientes y a lo largo de toda la vida, en atracción, y en identificación y difusión consistente de sus símbolos y significados asociados. Cuatro aprendizajes que pueden hacer de nuestra marca, la mejor opción para nuestros clientes, de por vida.
Clara López
Strategy Copywriter
Brand Union
COMMENTS